La marquesa es una mujer con dos hijos; ha enviudado y vive con sus padres en un pueblo en el norte de Italia. Una de las guerras entre diferentes potencias europeas ha conducido al saqueo del lugar por parte de las tropas rusas. Amenazada por rufianes, la marquesa es rescatada por un conde ruso. Algún tiempo después, advierte que está encinta, siendo que no ha tenido ninguna relación conocida desde la muerte de su marido. Su familia la rechaza para evitar el escándalo, mientras el conde la corteja con insistencia.