Una obra compleja, escrita en lenguaje suntuoso, montada sobre un monólogo, en su momento tuvo una acogida muy entusiasta por parte del público y la crítica, como lo demuestran sus numerosas ediciones, que ya pasan de treinta sin contar las de idiomas extranjeros. La mayoría de los críticos reconoció que era un logro apreciable, una novela histórica y política entre cuyas virtudes estaban la paródica autenticidad del mundo narrado: la figura del caudillo latinoamericano.
El recurso del método -título que hace alusión al pensamiento cartesiano, cuyo orden la acción de la novela subvierte- es una de las cumbres del subgénero narrativo que podría denominarse "novela de dictador" y que integran obras tan destacadas como "El señor Presidente", de Miguel Ángel Asturias, "Yo, el Supremo", de Roa Bastos, o "El otoño del patriarca" de García Márquez. Suma o amalgama de varios dictadores de América Latina, como el cubano Machado, el guatemalteco Estrada Cabrera, el mexicano Porfirio Díaz o el venezolano Guzmán Blanco, el Primer Magistrado -soez y aparentemente ilustrado, corrupto, incapaz y de bajísimo vuelo histórico- es una de las creaciones más memorables de Alejo Carpentier (1904-1980) y un emblema perfecto de una figura histórica que aún hoy hace sentir su peso en Latinoamérica.