Para Aristófanes, en otros tiempos los sexos no eran dos sino tres: era el hombre, la mujer y la unión de los dos. Después de la división, "las dos partes del hombre, cada una deseando la otra mitad, se unen, se enlazan y añoran restablecer la antigua perfección de la unidad perdida".
Ética y feminismo, de Graciela Hierro, es un valioso estudio acerca de la condición femenina actual y de su crítica a través de la ética. Las mujeres son observadas a partir de un rango que les otorga la sociedad: "ser para otro" -el "segundo sexo" del que hablaba Simone de Beauvoir, y que se refleja sobre todo en tres condiciones inocultables: inferiorización, control y uso.
Reproductora, trabajadora doméstica, encargada del cuidado infantil y objeto erótico. "La división sexual del trabajo, sostenida a través de la sujeción de la sexualidad femenina, es el recurso útil para desarrollar, mantener y perpetuar la organización patriarcal fruto de las necesidades de la vida sedentaria", escribe Graciela Hierro.
Y si "el resorte de la inferiorización femenina, de su control y de su uso, se localiza en los niveles más profundos de la relación humana", toca dirigirse hacia aquellos ámbitos adonde las leyes igualitarias y las buenas intenciones no han llegado todavía. La autora, por lo tanto, apoya su estudio en una creencia profunda: "La eliminación de la opresión femenina es el deber moral de las mujeres".
Graciela Hierro Pérezcastro (Ciudad de México, 1928 - 30 de octubre de 2003) fue una filósofa especializada en ética que introdujo la filosofía feminista en México. En 1978 fundó la Asociación Filosófica Feminista de México. Fue además la primera directora del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG) en la Universidad Nacional Autónoma de México.1?
Desarrolló el concepto de género a través desde un estudio histórico y filosófico institucionalizando el feminismo en la academia2?. Es fundamental en el desarrollo de su investigación y postura en el campo de la ética. Su trabajo trascendió los ámbitos académicos y cobró importancia en la esfera política y cultural mexicana.3? Gracias a sus convicciones facilitó que se abordaran aquellos temas relacionados con el cuerpo y la sexualidad femenina considerados tabú en las sociedades patriarcales.