Las relaciones de pareja han sufrido profundas modificaciones recientemente. La forzada o voluntaria inserción de la mujer en el campo de trabajo productivo (en términos económicos), el cada vez mayor acceso a los anticonceptivos, con la consecuente disminución en el número de hijos y libertad para la elección de pareja (s) sexual (es), las campañas poblacionales promovidas por el Estado, que obedecen a intereses netamente económicos, los bajos salarios, las crisis económicas por las que atravesamos que influyen en la conformación, preservación y desintegración de parejas.