Las dos manos de Dios es una obra erudita, exploratoria y enormemente atractiva sobre los mitos de la polaridad, las relaciones simbólicas entre opuestos como la luz y la obscuridad, el bien y el mal, el nacimiento y la muerte, la acción y la inacción, el yin y el yang, etc. Esa polaridad de términos opuestos muestra, al mismo tiempo, su profunda unidad interna, su inseparabilidad.
Las dos manos de Dios es un estudio de mitologías comparadas (el libro recoge abundantes mitos y relatos tomados de fuentes chinas, indias, egipcias, iraníes y cristianas) y es también una obra llena de contenido para una nueva y más profunda manera de vivir. La realidad no puede aprehenderse de una sola faceta; hay que unir los antagonismos y recuperar una sabiduría tan antigua como nueva.
Escrito en su peculiar estilo lúcido y ameno, este libro de Alan Watts posee la inagotable acutalidad de sus mejores ensayos.
Alan Watts (1915-1973) es una de las figuras más asombrosas y controvertidas del pensamiento llamado contracultura. De gran influencia en los convulsos Estados Unidos de los años sesenta, Alan Watts también era un eminente especialista en filosofía oriental. Fue uno de los primeros en traducir la sabiduría oriental al lenguaje de nuestro tiempo, a través de una crítica de la vida cotidiana que cobra cada vez más actualidad.
Místico, poeta y ferviente ecologista, Alan Watts era un filósofo para quien la existencia y el sentido del humor nunca podían separarse. Prueba de su capacidad para tomarse con humor los asuntos más trascendentes fue su respuesta cuando le preguntaron por qué era vegetariano: "Porque las vacas gritan más que las zanahorias".