La figura del diablo ocupa un lugar fascinante en la historia europea y una posición nada evidente en la transición del feudalismo a las primeras formas de producción capitalistas, tal y como muestran los siniestros capítulos de persecución de brujas y la erradicación de las culturas comunitarias campesinas de base precristiana. En este libro ya clásico, Michael Taussig observa una trayectoria similar en la imposición de las formas de producción capitalistas entre las comunidades agrarias de América Latina, al tiempo que nos sumerge en el significado social del diablo en el folclore de los mineros bolivianos y los trabajadores del valle del Cauca en Colombia. Todo ello dentro del marco de una evolución histórica que cubre desde la conquista española y el trabajo esclavo en las plantaciones hasta la minería y la agroindustria modernas.