De profundis es un pedido de auxilio, un grito de dolor en contra de la insensibilidad del mundo, contra la irracionalidad, un texto nacido desde el desaliento y la degradación que viene a desembocar en una gran mediocridad impuesta; desenlace en el que aterriza Wilde debido a su arduo sufrimiento en la cárcel, tratando de transmitirle al joven Bosie el valor y la belleza del dolor. Este proceso va desde la vivencia lúcida y sin objetivo de vida hasta la necesidad de dar significado a su tormento.