Willy quiere jugar fútbol, pero no tiene botines. Una noche, de camino a casa, un desconocido, que lleva un antiguo uniforme de fútbol, le regala los suyos. Aunque un poco pasados de moda, con ellos Willy juega ¡maravillosamente! y es seleccionado para el partido del sábado. Pero cuando llega el día... ha olvidado los botines. ¿Qué va a pasar ahora? Otro libro entrañable de la saga de este personaje favorito de niños y adultos.