El Zarco y Los Bandidos del Rio Frio en el siglo XIX, los narcocorridos y el tortilla western de los hermanos Almada en el XX, y mas recientemente en la literatura, la plastica y la cinematografia de creadores como Elmer Mendoza, Luis Estrada y Teresa Margikkes develan el sentido y la funcion social del crimen en Mexico.
A diferencia de autores como Fuentes, Revueltas y Paz, para quienes la violencia y lo terrible expresan cierta esencia de lo mexicano, Hector Dominguez Ruvalcaba sostiene que la criminalidad ha de interpretarse a partir de la incompetencia del Estado y como forma de control social. He aqui un mundo donde el crimen se imprime en figuras de masculinidad, en cuerpos rotos, en muertos anonimos y excluidos de la memoria, en feminicidios y otras violencias de genero. Un mundo que narrativiza la corporeidad de la violencia.