Cuando predominan las narraciones de autoayuda y superación personal en un entorno cada vez más comercial, es difícil encontrar un libro sin pretensiones morales y escrito con la honestidad necesaria para conectar con nuestra alma. Más complicado se vuelve entonces confiar en el contenido y en los autores de tales obras.
El Hombre que Ganó Cuando lo Perdió Todo es un antídoto para ese tipo de libros, pues el Doctor Víctor Espinosa no solo nos habla desde la dolorosa intimidad de sus vivencias, recuerdos y pérdidas para comprender el proceso terapéutico de sanación, sino que lo hace de manera inteligente y original: poniéndonos a nosotros los lectores en los zapatos del terapeuta para así llevar de la mano al paciente, que en este caso es el propio autor.
Esta obra no es una de autoayuda o de superación personal, es un libro que tiene el potencial de sanar a través de las heridas y las lágrimas de otros, al hacerlas nuestras
pues por medio de sus letras podremos comprender que no estamos solos en nuestro dolor cualquiera que sea y, a veces, eso es lo único que hace falta para no claudicar. Aquí no hay decálogos para una mejor vida o instrucciones para curar tu mente, mucho menos un burdo: Si yo pude tú también puedes, sino, nos encontramos ante una verdadera reflexión y una voz que desesperadamente quiere comunicar: Sé que duele, sé que es difícil, sé que es triste. La vida puede ser así
y a pesar de ello, al final, puedes ganar.
Así que toma tu cuaderno de apuntes, afina tu pluma, siéntate cómodamente y haz pasar a tu nuevo paciente, pues nuestra sesión está a punto de comenzar y estará llena de sorpresas emotivas, momentos conmovedores, divertidos y mágicos; viajaremos entre mundos, cuadriláteros y otros tiempos.
Y, bueno, ya sabes lo que dicen: Es peligroso ir solo, toma esto. Quizás te pueda ser de ayuda.