Hoy en día, Pixar es uno de los grandes del entretenimiento: es el estudio que revolucionó los efectos digitales especiales y la animación por computadora, y el que ha desarrollado una serie de películas de gran éxito, como la icónica Toy, Story, y Buscando a Nemo, Ratatouille y Coco. Sin embargo, cuando Lawrence Levy se unió a Pixar en 1995, era una compañía de software que apenas se mantenía a flote: no se sabía muy bien a qué se dedicaba y perdía dinero a raudales.