Si se habla de novela gótica, indudablemente se debe de mencionar a El castillo de Otranto, del escritor Horace Walpole.
Escrita en el siglo XVIII, El castillo de Otranto es la novela que inaugura el género gótico dentro de la literatura, el cual comenzó a ser muy popular por autores como el mismo Walpole, Ann Radcliffe o Matthew G. Lewis.
Ambientada en la Italia medieval, la novela de Walpole da giros inesperados, en donde el terror y lo grotesco encierran las perversidades que se hayan dentro del castillo, afectando a sus habitantes, transformándolos y haciéndolos dudar.
El castillo de Otranto es, sin duda, uno de los pilares del Romanticismo inglés, debido a su lenguaje, imágenes y situaciones que envuelven al lector, al grado de erizar la piel mientras se sienten las paredes malditas de cada pasaje del castillo.