Se trata de un libro que repasa estructuras gramaticales del inglés a través de divertidas canciones. Toda la familia disfrutará de las canciones marchosas y pegadizas y aprenderá inglés cantando sin darse cuenta. Los animales y sus características aportan un factor de diversión y ayudan a entender las estructuras aún mejor. Un libro perfecto para viajes en coche y cualquier actividad de niños como una tarde de juegos en casa, fiestas infantiles o deporte.