El masaje occidental suele ser principalmente un masaje muscular, con todas sus virtudes. Es sin embargo muy diferente del masaje Chi. El sistema de rejuvenecimiento taoísta emplea la propia energía interna, la energía Chi, para fortalecer y rejuvenecer los órganos sensoriales -ojos, oídos, nariz, lengua, dientes y piel- y también los órganos internos. Sus técnicas tienen miles de años y hasta muy recientemente eran secretos celosamente guardados, comunicados únicamente del Maestro a un reducido grupo de estudiantes. Con frecuencia cada Maestro tenía sólo una parte del conocimiento. El maestro Mantak Chia ha recompuesto por completo el sistema taoísta de masaje Chi y nos lo muestra en este libro en una secuencia lógica y de forma tal que una vez examinado necesitaremos sólo cinco o diez minutos de práctica diaria para en muy breve tiempo poder apreciar una gran mejora en el funcionamiento de nuestra vista, oído, gusto, olfato, órganos internos y del cuerpo en su totalidad